Atacante estaba fuera de la realidad durante el crimen.
Atacante estaba fuera de la realidad durante el crimen.

La salud mental es una de las cosas más desatendidas en nuestro país, pese a que su impacto en los pacientes y en la sociedad en general puede ser terrible y muy doloroso.

Y así fue comprobado en horas de la madrugada de ayer viernes, cuando Alfonso Dalí Ramos (50) mató a puñaladas a su propio hijo, Piero Ramos (31) en su inmueble del Cercado de Lima.

El victimario padece de esquizofrenia y había dejado de tomar sus medicamentos, confirmaron sus familiares, por lo que el problema mental que padecía lo habrían llevado a cometer el crimen.

HORROR

El hecho ocurrió en el segundo piso de un edificio ubicado en la cuadra 16 de la avenida Teniente Arístides del Carpio.

En este lugar, se encontraban los hijos de la víctima y nietos del atacante, quienes observaron la traumática escena. Además, se encontraba la nuera del paciente psiquiátrico y la madre de ella, quienes también fueron heridas con el mismo cuchillo de cocina que provocó la muerte del joven.

Fueron trasladadas a la clínica Estela Maris, pero ya era muy tarde para la víctima. Se investiga por qué el agresor dejó de tomar las medicinas que lo controlaban.

El Ministerio de Salud (Minsa) califica a la esquizofrenia como un trastorno mental severo que se caracteriza por la pérdida de contacto con la realidad. Se estima que una de cada 100 personas sufrirá el mal en su vida.

OJO AL DATO

La familia confirmó que el agresor estaba en una clínica psiquiátrica, pero nunca mostró un comportamiento tan violento.