Cuatro hermanas, unidas por la perseverancia y la visión, decidieron transformar sus sueños en realidad. Con determinación y fuerza femenina, lograron llevar su pasión a nuevos horizontes, demostrando que todo es posible con esfuerzo y valentía.
En 2016, las hermanas Málaga, originarias de Ollachea, Puno, unieron sus talentos y su amor por los accesorios. “Desde nuestro pueblo, escuchamos nuestros sueños y, con perseverancia, los hicimos realidad”, comenta Olga Málaga. La historia de estas cuatro mujeres refleja el poder de la resiliencia y el trabajo constante.
Sifrah, más que una marca de accesorios, es el resultado de ese esfuerzo y pasión. Desde sus inicios en la venta ambulante y en el mercado central, hasta llegar a ser lo que es hoy, su crecimiento demuestra cómo la visión de las hermanas se convirtió en un símbolo de superación. El nombre “Sifrah”, que significa “belleza” en hebreo, nació tras un viaje de Olga a China, y con él, su misión de crear accesorios que resalten la belleza y esencia de cada persona, fusionando tendencias globales con raíces culturales.
A pesar de los desafíos iniciales, incluyendo la problemática de llegar a mínimos en la compra de productos y la competencia, su determinación las llevó a construir una empresa basada en la innovación. La pandemia fue una prueba difícil, pero decidieron mantener a su personal en planilla, consolidando su compromiso humano. Gracias a su capacidad de adaptación, implementaron estrategias digitales que les permitieron mantener contacto con sus clientes y expandir su alcance.
CRECIMIENTO Y CONSOLIDACIÓN
Hoy, Sifrah es un referente en moda y empoderamiento femenino con su lema “Brilla como tú quieras”. En 2024, abrieron más de 20 nuevas tiendas y planean expandirse internacionalmente pronto.
En diciembre de 2024, inauguraron su tienda en Real Plaza Juliaca. “Creemos que los accesorios van más allá de la moda; son expresiones de nuestra identidad”, compartió Matilde Málaga en el evento. La inauguración contó con la presencia de clientes fieles y nuevos seguidores que celebraron junto a las fundadoras este gran logro.
Más allá del éxito comercial, las hermanas buscan inspirar a más mujeres emprendedoras. “El secreto es trabajar arduamente y vencer los miedos al fracaso”, afirmó Olga Málaga.
Además, a través de charlas y eventos, buscan compartir su experiencia y motivar a nuevas generaciones a seguir sus sueños.
Con planes de expansión y una comunidad fiel, Sifrah sigue brillando y dejando huella en la moda.
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