La conexión entre el conductor y su acompañante es esencial para garantizar una conducción segura. La comprensión mutua entre ambos es clave, ya que el comportamiento del copiloto puede ayudar a evitar distracciones y, por lo tanto, reducir el riesgo de accidentes. Por esta razón, preste atención a estas reglas que todo buen acompañante debe conocer:

EVITE LAS DISTRACCIONES. Procure no hablar en exceso ni realizar actividades que desvíen la atención del conductor.

COMUNICACIÓN CLARA. Sea claro y directo con las indicaciones para evitar confusiones. No utilice términos vagos.

AVISE CON ANTICIPACIÓN. Informe al conductor con antelación sobre cualquier acción que necesite, como si debe frenar o girar en una calle. Dar instrucciones intempestivamente puede desconcertar al conductor e, incluso, provocar un accidente.

AYUDE CON LA NAVEGACIÓN. Utilizar aplicaciones de navegación y mapas con precisión es crucial. Colabore en la planificación de rutas, identificando posibles obstáculos y sugiriendo alternativas cuando sea necesario.

SEA OBSERVADOR. Manténgase atento a los detalles. Observe el entorno y las condiciones del camino, alertando sobre posibles peligros.

GESTIONE EL ESTRÉS. Proporcione apoyo emocional al conductor durante momentos desafiantes y busquen soluciones juntos en lugar de culparse o discutir.

RESPONSABILIDAD COMPARTIDA. Si el viaje es largo, considere alternar turnos para evitar la fatiga.

PROGRAME PARADAS. Colabore en la planificación de descansos y actividades durante las paradas para hacer el viaje más placentero.

OJO AL DATO. Colocar los pies en el panel del auto es una actitud peligrosa que puede poner en peligro no solo al copiloto, sino al resto de pasajeros.

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