El comienzo del año escolar está a la vuelta de la esquina, y con ello muchos padres no solo enfrentan la tarea de comprar los útiles escolares, sino también de pensar en los refrigerios más adecuadas para sus hijos. Con el calor del verano mantener los alimentos seguros en las loncheras se convertirá en todo un reto.

Este factor, sumado a la necesidad de que los alimentos lleguen en óptimas condiciones, hace que la elección del refrigerio sea aún más importante. Las altas temperaturas pueden hacer que productos como los jugos y la leche se echen a perder rápidamente, favoreciendo el crecimiento de bacterias que afectan su sabor, textura y seguridad, lo que incrementa el riesgo de intoxicación alimentaria.

Ante este gran desafío, expertos de Tetra Pak comparten algunas recomendaciones para enviar alimentos y bebidas más seguros para los niños:

Elegir envases asépticos: el calor extremo puede ser un enemigo silencioso para la salud de los escolares. Durante esta temporada, garantizar que las bebidas en sus loncheras sean seguras y libres de contaminantes es más importante que nunca. Cuando los alimentos no están correctamente protegidos, aumenta el riesgo de que terminen contaminados o degradados por factores externos, como la luz, el oxígeno y microorganismos. En este punto los envases asépticos se convierten en una gran defensa.

Estos envases de cartón emplean una tecnología de esterilización que elimina bacterias y microorganismos, asegurando la seguridad y conservación del producto por largos períodos. Gracias a su innovador proceso de envasado, crean una barrera total contra estos agentes, manteniendo jugos y leches seguros y listos para el consumo, sin necesidad de refrigeración, incluso cuando se exponen a altas temperaturas.

Incluir lácteos: de acuerdo con la Federación Panamericana de Lechería (Fepale), los niños necesitan, para nutrirse bien, entre 2 y 4 porciones diarias de lácteos, dependiendo de su edad. Productos como la leche y el yogur, ricos en calcio y vitaminas esenciales, son una solución práctica para complementar las loncheras. En este sentido, los envases de cartón para bebidas destacan por su capacidad para proteger los alimentos, gracias a sus seis capas protectoras que aseguran su conservación, además de resguardarlos del calor extremo.

Optar por envases prácticos: si hay algo que los padres temen al preparar las loncheras escolares, son los derrames que arruinan la mochila, los útiles… ¡y el día! Pero no solo se trata de evitar desastres, sino de garantizar que los alimentos y bebidas lleguen en perfectas condiciones. Los envases de Tetra Pak® se han convertido en los mejores aliados para ello; gracias a que son seguros, livianos y no requieren refrigeración, es posible lograr que los alimentos estén disponibles en cualquier lugar.

Además, su variedad de tamaños permite ajustarse a cualquier necesidad, ocupando el mínimo espacio en las loncheras y asegurando que tus hijos tengan acceso a una fuente confiable de energía durante todo el día escolar.

Organizar en compartimentos: una buena organización es clave. Distribuir los alimentos de la lonchera en compartimentos separados además de facilitar el acceso a cada uno, evita que los productos con mayor sensibilidad al calor, se mezclen con otros que puedan afectar su calidad. Esta separación te ayudará a mantener un ambiente controlado para cada tipo de alimento.

Mantener una rutina de higiene: la seguridad alimentaria inicia en casa. Es importante promover el lavado de manos y utensilios, y limpiar los productos que irán en la lonchera. Una manipulación cuidadosa minimiza la posibilidad de contaminación, reduce la generación de malos olores y contribuye a que los productos estén en buenas condiciones para consumir.

Diversificar las loncheras: es clave incluir frutas, verduras y granos en los refrigerios de los niños. Para el Ministerio de Salud, la diversidad de productos en las loncheras, sobre todo en verano, debe cubrir del 10 % al 15 % de la energía total requerida diariamente por el menor para que pueda desempeñarse adecuadamente y no se vea afectado su rendimiento escolar durante el horario de clases.

Con estas recomendaciones, los padres pueden asegurarse de que los refrigerios que envían con sus hijos sean seguros. Elegir envases adecuados y seguir prácticas de higiene y organización no solo protegen la alimentación de los niños, sino que también contribuyen a que mantengan su energía y concentración durante el día escolar, incluso en medio del calor extremo.

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