El Labubu, un muñeco con muchos dientes y esponjoso, se ha convertido en tendencia mundial y todo un triunfo para la empresa china Pop Mart, que lo fabrica y comercializa.

Y todo gracias a su comercialización innovadora, edición limitada y el apoyo de famosos fanáticos en TikTok. No es un juguete: se ha convertido en un objeto de culto y un accesorio de moda. Llevarlo colgando de la bolsa, la mochila o en el panel de control del carro es sinónimo de modernidad.

En China es muy habitual que chicos y chicas lleven pequeños peluches y juguetes colgando, como llaveros de bolsos o incluso pegados a la ropa, pero, curiosamente, el éxito del Labubu es global. Cuando se ha anunciado el lanzamiento de un nuevo muñeco se han podido ver largas colas en las tiendas de Pop Mart en Tokio, Nueva York, Dubai, Londres o París.

El personaje es obra del diseñador Kasing Lung, nacido en Hong Kong. Fue creado en 2015 para una serie de libros ilustrados: The Monsters. Labubu es uno de los personajes, pero le acompañan otros, como Zimomo, Mokoko, Pato, Spooky o Tycoco.

Vienen en cajas sorpresa

La serie de Labubu y otros compañeros, como Molly, se comercializa en cajas sorpresa. La última colección lanzada en abril se vendía en China a unos 12 euros, pero algunos modelos antiguos pueden superar los 300 euros.

Gran parte del éxito se debe al marketing en las redes sociales. Los vídeos de TikTok u otras plataformas en las que influencers o simples consumidores abren compulsivamente las cajas de Pop Mart para descubrir qué muñeco han comprado son virales.