Lúcio, el histórico futbolista pentacampeón del mundo con Brasil en 2002, está jugando su partido más difícil internado en una clínica tras sufrir serias quemaduras en un accidente casero con una chimenea ecológica, que funciona con alcohol.

El defensa central, cuyo nombre es Lucimar da Silva Ferreira, terminó con el 18 % de su cuerpo con quemaduras de segundo grado y se recupera en una clínica privada en Porto Alegre tras ser trasladado desde el Hospital de Brasilia.

El ex Inter, con más de 100 partidos con el “Scratch”, que jugó los mundiales del 2002, 2006 y 2010, publicó una foto en Instagram, en la que se le ve con vendas en sus brazos, piernas y cabeza. Debió someterse a dos cirugías.

Tanta fue la conmoción en Brasil y el mundo del fútbol, que los asesores del ex jugador publicaron un comunicado detallando el avance en la recuperación. “El tratamiento, realizado hasta el momento de forma segura y eficaz por un equipo multidisciplinario especializado en quemaduras, continúa con buena evolución clínica”, precisa el escrito.

Se está recuperando

“Él se está recuperando bien, gracias a Dios. Pero el tratamiento de quemados requiere muchos cuidados”, dijo a la agencia de noticias AFP una portavoz del Lúcio. “Está enfrentándolo un día a la vez”, agregó.

Lúcio, en 2010, con el Inter de Milán logró el triplete: Liga de Campeones, Scudetto y la Copa de Italia bajo las órdenes de José Mourinho.

Lúció se retiró en 2020 y en su currículum destacan equipos como Juventus, Bayer Leverkusen, Bayern Múnich, Inter y Sao Paulo, entre otros.