Estados Unidos puso en el aire sobre el Caribe aeronaves espía, cazas, bombarderos y al “Avión del Juicio Final” para simular un ataque sobre Venezuela, a la vez que probó el lanzamiento de bombas pesadas con explosiones reales y siguió con los entrenamientos de sus tropas aerotransportadas y de desembarco.
La fuerza estadounidense pone a punto el ataque que contra territorio venezolano anunció el presidente Donald Trump para sacar del poder en Venezuela a Nicolás Maduro.
Si Estados Unidos ataca territorio de Colombia será una declaración de guerra, indicó su presidente, Gustavo Petro.
Fuerza de ataque
Cazabombarderos F-18E/F Super Hornets simularon ataques a Venezuela tras despegar del portaaviones más grande del mundo, el USS Gerald R. Ford; y volaron dos aviones Boeing 747-E4B, conocidos como “Nightwatch” o “Avión del Juicio Final”.
Los “Nightwatch” operan como centro de mando y control aéreo móvil y altamente fortificado de jefes militares durante una guerra, y están protegidos hasta contra radiación nuclear.
Además, cerca al Área 51, en el desierto de Nevada, a 135 kilómetros al norte de Las Vegas, hubo pruebas de lanzamiento de bombas pesadas desde bombarderos B-52H y la tierra tembló.
Se moviliza
En tanto, Maduro cambia de lugares de descanso y teléfonos celulares para evitar un posible ataque de precisión o la incursión de fuerzas especiales para secuestrarlo o asesinarlo, reveló el diario The New York Times.
Su objetivo es sobrevivir. Varias veces, Estados Unidos e Israel han matado a enemigos políticos tras rastrear sus comunicaciones.




