Hoy, nuevamente, los gremios de transporte público, mototaxis, bodegueros, maestros, empresarios de Gamarra y la población en general se unen en una jornada de movilización ante el aumento de crímenes, extorsiones y asesinatos de choferes. Además, exigen la renuncia de la presidenta y medidas urgentes frente a la creciente inseguridad. La población se cansó de estados de emergencia que no han dado resultados y de ver cómo día a día se matan a choferes sin que ninguna autoridad haga algo al respecto. Si acaso la Policía logra capturar a alguno de esos asesinos, estos salen en libertad a los pocos días. El Ministerio Público los deja libres porque, dicen, hay leyes que el Congreso aprobó que impiden procesos judiciales rápidos. La falta de un trabajo coordinando entre las autoridades deja a la población en medio de una ola de criminalidad que la revuelca, desprotegida, a su suerte. Marchas como la de hoy solo reflejan el descontento de la población ante la indiferencia de este gobierno.
