Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.
El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.
Hoy te cuento la historia de Mauricio, de 26 años, que nos escribe desde Jesús María.
Querida doctora Magaly Moro, le escribo porque necesito de su consejo, no sé qué hacer con mis amigos, soy el centro de las burlas porque me gustan las mujeres gorditas. Para mí son hermosas, seguras y muy atractivas, pero mis amigos siempre han usado eso para hacerme bromas que, aunque antes no me afectaban tanto, ahora me incomodan.
Hace poco conocí a Natalia, una chica de talla grande que realmente me interesa. Es dulce, divertida y está entradita en carnes como a mí me gusta. Hemos empezado a salir hace un mes. Ella me ha dicho que le gustaría conocer a mis amigos, pero me da miedo que ellos empiecen con sus chistes. No quiero exponerla a un mal momento ni que piense que me avergüenzo de ella. No quiero lastimarla.
He intentado poner límites, pero ellos me tildan de exagerado. No entienden que ya no se trata solo de bromas hacia mí, sino de respeto hacia alguien que me importa. Me da rabia pensar que por su inmadurez puedan hacerle pasar un mal rato a mi Naty.
Yo quiero que ella se sienta cómoda y valorada a mi lado. No sé cómo manejar esta situación, ni cómo proteger la relación que recién está empezando. Por eso recurro a usted, esperando un consejo que me ayude a actuar sin lastimar a nadie. ¿Qué hago?
CONSEJO
Querido Mauricio, tus sentimientos son válidos y no tienes por qué justificar lo que te atrae. El problema no eres tú, sino la falta de respeto de tus amigos. Habla con ellos con firmeza y deja claro que no tolerarás bromas que afecten a Natalia; los verdaderos amigos sabrán entenderlo. Tu pareja merece respeto y tú también. Suerte.




