Actualizado el 12/11/2025, 06:00 a.m.
Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.
El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.
Hoy te cuento la historia de Felipe, de 33 años, que nos escribe desde Miraflores.
Doctora Magaly, noto que mi pareja rara vez me demuestra cariño. Antes nos abrazábamos, nos decíamos cosas lindas y había gestos espontáneos, pero ahora casi todo desapareció. Me duele sentir que solo compartimos la casa y las responsabilidades, sin cercanía emocional. Siento que los buenos momentos entre los dos se han reducido a lo mínimo, y eso me hace sentir un poco solo dentro de la relación.
Además, cuando trato de abrazarla o decirle algo bonito, muchas veces lo toma como raro o simplemente se queda callada. Me hace sentir rechazado y a veces hasta un poco ridículo por buscar mantener la ternura entre nosotros. Me preocupa que si esto continúa, nuestra relación se vuelva una rutina de obligaciones sin amor.
Quisiera que pudiéramos recuperar esas muestras de cariño, aunque sean simples y pequeñas, como antes. Sé que ambos necesitamos expresarnos y demostrarnos afecto para sentirnos cerca. No quiero que esto se interprete como exigencia, sino como el deseo de volver a sentirnos queridos. Me preocupa que la falta de gestos afectivos termine generando más distancia, y por eso busco la manera de mantener viva la cercanía que antes compartíamos.
A veces dudo si es mucho lo que espero, pero sé que para que la relación funcione necesitamos ambos demostrar cuidado y cariño, no solo cumplir con responsabilidades. ¿Cómo puedo lograr que volvamos a sentirnos cerca sin que se sienta forzado?
CONSEJO
Felipe, prueba con pequeños gestos diarios que no sean forzados, como un mensaje cariñoso, un abrazo rápido o un toque en la mano mientras cocinan juntas. A veces solo decir “me gusta estar contigo” o “me alegra compartir este momento” puede cambiar mucho la conexión. No hace falta un gran gesto, solo muestra cariño sin presión para que ambos sientan que todavía se importan mutuamente.




