La comunidad peruana en Estados Unidos enfrenta una creciente preocupación ante el endurecimiento de las leyes migratorias implementadas por la administración de Donald Trump.
Según estimaciones de la Cancillería peruana, aproximadamente 300 mil peruanos residen en territorio estadounidense sin un estatus legal, lo que los convierte en potenciales candidatos para la deportación.
Las cifras revelan que la comunidad peruana en Estados Unidos alcanza aproximadamente un millón 60 mil personas.
Esta población es particularmente vulnerable a las políticas de control migratorio más estrictas que han sido aplicadas en los últimos años.
En ese sentido, el director general de Comunidades Peruanas en el Extranjero y Asuntos Consulares, Pedro Bravo, precisó que estos ciudadanos podrían ser deportados en los próximos días, dependiendo de su situación legal.
No obstante, algunos podrían optar por solicitudes de refugio o procesos judiciales para evitar su expulsión inmediata.
DEPORTADOS. La madrugada de ayer, un primer grupo de 34 peruanos fue deportado desde Estados Unidos por incumplir las leyes migratorias.
A su llegada al Perú, fueron recibidos por autoridades nacionales y escoltados por la Policía. El Ministerio de Relaciones Exteriores anunció que los retornados recibirán asistencia para su reinserción en la sociedad peruana.
“Conscientes del impacto humano que implica un proceso de esta naturaleza, y al igual que en otras oportunidades, la Cancillería convocó a diferentes instituciones públicas con el propósito de brindar asistencia médica, psicológica y social inmediata a nuestros connacionales”, indicó la Cancillería mediante un comunicado oficial.
El ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Daniel Maurate, aseguró que su sector brindará respaldo a los peruanos deportados. Según explicó, el Estado buscará facilitar la integración de estos ciudadanos al mercado laboral formal.